Viaje en bus (+18) Completo

Aquí les traigo otro entretenido fic, es de nuestra amiga Kata de Chile, más bien conocida como "quierotuvolvo" o kata_Mansen en algunos foros. Los personajes son de nuestra amiga Stephanie Meyer pero toda la trama es de ella. Me gusto mucho ese fic ya que de alguna forma más de una vez hemos tenido la oportunidad de viajar en bus y de que nuestro compañero del lado es alguien muy lindo y no hacemos nada para conocerlo... bueno con este fic soñemos un poco...

Sinopsis: Viajar siete horas en bus muriendo de calor no es la mejor experiencia que puedes vivir. Si cierras los ojos solo esperando que el camino se acorte, hasta que una sensual voz te pide sentarse a tu lado,¿En que tipo de prueba transformaría este viaje?

Capítulo 1

Iba a ser un viaje tedioso…

La situación económica en casa estaba pasando por una pequeña crisis…eso no evitaba que fuera a visitar a mi madre y aunque el dinero actualmente no daba para pagar un boleto de avión, sí uno de bus.

Acababa de cumplir mi mayoría de edad y en mi no cabía la felicidad, me gusta ser independiente, aunque para que engañarnos si todavía dependo del techo de mi padre…aunque no por mucho… ser hija de padres separados se convierte en una costumbre después de un tiempo.

Durante estas vacaciones buscaría un trabajo y la forma de juntar dinero para mi matricula de la universidad del próximo año…tan solo había ido a ver a mamá para las navidades a su nueva casa en Chicago… y vaya que 7 horas en bus hasta Forks eran un asco…

Llegue al terminal y siempre me perdía en estas cosas… desde muy pequeña que no estaba en uno de estos y en mi viaje de ida, Charlie se encargo de todo para que yo solo posara mi trasero en el asiento del bus y no tuviera que mover ni un dedo y, bueno para sentirme independiente le dije a Renée que me podía ir sola a Forks, que sabia cómo…Gran error, por creerme la niñita grande ahora no sabia que hacer…Arg.

¿Señorita necesita ayuda?- Me pregunto un señor vestido semiformal, debí suponer que era uno de los auxiliares de las empresas de transporte…

La verdad es que estoy un poco perdida- ¿Un poco? Por favor estaba completamente perdida.

¿Necesita un ticket? Pues mi empresa puede ofrec…

No no no, gracias- le interrumpí- Ya tengo uno, pero no se que debo hacer- me sonroje mostrándole el boleto.

Oh, es de la línea en la cual trabajo… venga, yo la guío.

Seguí a este hombre no mayor de 35 años hacia una fila de buses, el terminal estaba medianamente lleno debido a que a la gente se le ocurre viajar para allá y para acá en estas fechas…genial, detestaba estar en multitud, no es que no pudiera ir a un concierto o algo así, pero estar rodeada de tanta gente en un dia soleado es horrible, el calor, el sudor…

¿Señorita?- el hombre pasó una mano delante de mis ojos sacándome de mis pensamientos, ya que, me había quedado estática- Venga, es el bus contiguo.

Oh, claro…- que estupida quedarte parada en medio de la gente pensando en sudor.

Bien, usted viaja a… - observó el ticket – Forks, hogar del bosque, ¿eh?

Mmm...… Es todo tan verde… - Fue lo único que pude decir, no sería muy cortés gritarle al caballero que si no fuera por mis amigas odiaría vivir en ese lugar. Y no es por ser malagradecida, Charlie me da espacio y trata en cierta medida de comprenderme y resaltar lo bueno de vivir allá, aire limpio, sin peligros de ciudad, etc.

Este es su bus y véalo que no es tan malo, todo lo contrario, ejecutivo con salón cama, una pequeña pantalla delante de sus ojos con películas a su elección con audífonos aisladores…- sonrió por la eficiencia que ofrecía el transporte.

La verdad con un libro me basta, pero el servicio es muy bueno- traté de ser amable y sonreír, no era una fanática de las películas, solo veía las recomendadas o los best-seller que se transformaban en estas…

Tomo mi maleta y la guardo en el portaequipaje, en la parte inferior del vehiculo.

señorita…

por favor deja de llamarme señorita, soy Bella…- ya estaba harta de que me llamara señorita.

bueno, solo porque usted lo pide, Bella, su asiento es el 36, está cinco puestos antes del final al lado izquierdo del bus y aquí dice…asiento pasillo.

Muchas gracias…en serio.

No se preocupe y disfrute del largo viaje que le espera…

Oh, genial – bromeé y el sonrió, después de todo el hombre me había tratado muy bien, no era de estos auxiliares acosadores que casi te regalan el cielo por que elijas su línea de buses.

Subí al bus de un piso y medio, los asientos estaban medianamente ocupados y gracias a Dios mi asiento vecino estaba vacío…con este calor lo ultimo que necesitaba era a alguien acompañándome a sudar.

Me senté y acomodé tomando un poco del refresco que había comprado antes de venir al terminal y lo dejé en la malla que tienen los asientos en la parte posterior.

Todavía no era tiempo de leer y para mi maldita suerte había olvidado mi Ipod en Forks. Tomé los audífonos que me correspondían según mi asiento y en la minipantalla del cabecero que estaba frente a mí, seleccione la sección de música clásica que contenía el menú, encendí el mini ventilador y por ultimo cerré mis ojos para olvidar el calor.

La música clásica siempre me relajaba, pero por una extraña razón me encontraba cansada y la melodía me llevo a la inconsciencia.

Sabía que me esperaban mi padre en casa, mi mejor amiga Alice, como amaba a esa pequeña, Rose también era una buena amiga y mi prima Ángela que iba a ir a visitarme este verano… al menos tenía la esperanza de que tendría un buen verano de chicas…

Pero aun así no soy una persona de riesgos, una vividora, come hombres, no. Siempre he sido mas tranquila, de buenas notas y sin muchos hombres en mi lista, sólo de besos ya que todavía no consideraba la idea de perder mi virginidad, no es que fuera una santa o algo por el estilo, también gustaba salir de vez en cuando a alguna reunión de amigos con Alice y Rose, esas en las que el alcohol es infaltable o alguna fiesta que Alice organizara…no puedes morir sin estar en una fiesta de Alice…

Pero, algunas veces por mi mente pasaba la idea de hacer algo atrevido e imprudente, sin herir a nadie, claro, pero que me hiciera sentir esa adrenalina al máximo que uno debería sentir alguna vez en su vida…

Qué idea mas disparatada ¿no?

Mientras seguía dormitando algo interrumpió mi reflexivo sueño.

- Disculpa, me darías permiso por favor…- pronunció la voz mas sexy y dulce que había oído en mi vida.

Uno más para que disfruten... besitos

Capítulo 4

Sabía que entablar una conversación no sería lo mas apropiado si mi principal objetivo era ignorarlo y evitar caer en ciertas tentaciones…Aunque la oportunidad de saber un poco de él me parecía de lo más atractivo, sabía que no era lo mas conveniente…

Al conocerme y saber que una simple conversación podía repercutir en mi organismo, lo mas adecuado sería rechazarlo…

Pero, ¿cómo?

Diciendo: sabes, a tu lado me comporto de manera tan impulsiva que creo imposible no tirarme encima si sigues mirándome de esa forma…No, no, en ese caso sí creería que estoy loca…

¿Y si me cambiaba de asiento? ¿Pero cuál sería la excusa?

¿Me molesta el sol que llega desde tu ventana?...perfectamente puede cerrar la cortina. No podía

Y un simplemente no me interesa hablar contigo?... No podía comportarme de una forma tan inmadura, además a quién quería engañar, porqué obsesionarme con las consecuencias si era una charla sin importancia… creo.

Y dejando de pensar analíticamente, como siempre, contesté:

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-Sí… definitivamente perdí el sueño- sonreí con desgana y él ensancho más su blanca sonrisa.

-Bueno, primero me gustaría saber tu nombre. – Le gustaría saber mi nombreee…ay, por favor es solo una forma de decirlo, no vayas a pensar que…

-Bella…

-¿Te llamas Bella? – preguntó extrañado.

-Isabella – respondí con una pequeña mueca – pero te agradecería que me llames sólo Bella…

-Ok… Bella…- pronunció mi nombre suavemente… y cómo no suspirar nuevamente, pero esta vez lo frené a mitad y así no se daría cuenta…eso esperaba.

-Pero, ¿tu nombre?- dije rápidamente.

-Edward – respondió mirándome de forma intensa con sus hermosos ojos verdes... Buen nombre para alguien como tú, me hubiese gustado comentar, pero no era el momento, o sea no era apropiado.

-Mmm...…-Fue lo único que articulé… como comunicadora social definitivamente me muero de hambre.

-Y ¿A dónde viajas?- preguntó.

-A Forks… - mencioné el nombre del pueblo con disgusto.

-Ah, yo también… bueno, debo bajarme 5 kilómetros antes a decir verdad.

-Pero ahí solo hay bosque… - dije frunciendo el ceño- a no ser que vivas en una casa en un árbol- Soltó una pequeña y musical carcajada que no pude evitar unirme también.

-Eres muy chistosa…-sonrió.

-Créeme que no lo soy- dije un poco sorprendida.

-Mmm… en ese caso lo eres sin la intención de serlo- acotó manteniendo la sonrisa.

-Después de unos minutos te aburrirás…- dije convencida, normalmente no era una persona interesante con la cual podrías estar sentado charlando por horas.

-No lo creo… - lo dijo tan bajo que perfectamente podría haber oído mal.

-¿Qué?- pregunté para asegurarme de que había escuchado bien.

-¿Qué?

-¿Dijiste algo? – volví a preguntar ansiosa.

-Eh, no…estaba pensando en voz alta… -definitivamente no dijo lo que yo creí haber escuchado… ¿Por qué pensaría algo así?, Déjate de nuevas paranoias Bella…- ¿Y por qué motivo vas a Forks? Espero no sea una pregunta personal

-No - Le interrumpí – Vivo en Forks hace un año y medio... con Charlie.

-Oh… tienes una pareja…- dijo con tono apagado

-Nooo - casi grité - Charlie es mi papá…qué estúpida obviamente no sabes quién es - qué vergüenza, otro motivo por el cual ruborizarme. Pero como no estaba acostumbrada a hablar con gente extraña... todas las personas que conozco conocen a Charlie así que… arg, tonta.

-Aaah… eso suena mejor, no me podría imaginar a alguien tan joven como tú conviviendo ya con alguien…o casada.

-No por favor…- me horroricé tan sólo pensar la idea de estar casada, pero lo que me molestó fue ese "alguien tan joven como tú", ya soy grande y madura. O eso intento.- No pienso casarme al menos por unos años, en todo caso no sería nada extraño, ya tengo 18 así que…

-Así que estás soltera y eres mayor de edad…- eso sonó mas a afirmación que pregunta.

-Sip

-Perfecto…- Sonrió de forma maliciosa

-¿Perdón?

-… - inspiró rápido por la boca- nada…- Soltó el aire y compuso una sonrisa angelical que no llegó a sus ojos – Tiendo a pensar en voz alta y debo trabajar en ello… necesito ir al baño – se levantó y yo ladeé mis piernas para que él con un agraciado andar caminara hacia el fondo del autobús.

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Eso me dejo……….. Sin palabras… pero bueno, no soy la persona mas indicada para hablar de reacciones extrañas, ¿no? Mal que mal él iba hacia el tocador por una necesidad natural…retención de líquido qué se yo y no por que alguien casualmente se recargo contra ti y tu literalmente corriste hiperventilando… eso si era… no tenia nombre.

Mientras se dirigía al baño no pude evitar voltear a admirar o mas bien babear por esa ancha espalda… no tenía el GRAN físico, pero se notaba que tenía sus músculos tonificados, no a extremos… gracias a su camiseta manga corta podías observar sus delineados tríceps …la palabra era preciso, Sí, su cuerpo era PRECISO, para todo tipo de acción…

Me giré para dejar de acosar mentalmente al modelito inglés y observé el aburrido paisaje, en comparación con el anterior, que me ofrecía la ventana.

Pasábamos por la carretera de una ciudad que no conocía, lo único visible eran casas por aquí y por allá, de colores parecidos o todas iguales no sé… sinceramente esa vista era de lo mas aburrido, así que no me ayudo en nada para sacar la figura de Adonis de mi cabeza…

Tomé mi refresco, bebí un sorbo de él y automáticamente recordé que había sido él el último en posar sus magníficos y bien formados labios en mi botella, eso me llevó a pensar en la sensación que hubiese experimentado si no hubiese escapado al baño cuando los toqué…

Rodé la tapa de la botella cerrándola, la dejé en la malla y sacudí levemente mi cabeza para aclarar las ideas y en eso recordé que él también iba a Forks…o cerca. ¿Tendría algún familiar o sería primera vez que iba? En ese caso podría ofrecer mis servicios como guía turística, pero no funcionaría… no hace mucho que vivía en el pueblo y con mi suerte a la hora ya estaríamos perdidos en el bosque… aunque tampoco era mala idea. Él y yo… solos es el bosque, ése lugar que en cierta parte me desagradaba con ésta compañía se transformaba en el mejor panorama que un pueblito que te podían ofrecer…

En eso Edward volvió con su elegante caminar. Era lindo pensar en él ya con un nombre para identificarlo…

Moví mis piernas nuevamente para que pasara sin necesidad de pedir permiso, avanzó hacia su asiento dándome la espalda y entregándome una buena vista de su bien formado trasero…Y QUÉ GANAS DE APRETAR UN POQUITO…NONONO… cálmate Bella, no te descontroles, atrapa el auto…eso, Auto-control, palabra sabia.

Cuando volvió a posar su bendito cuerpo en el bendito asiento, antes que me mirara puse la mejor cara de" aquí nada pasó" y él con su hermosa sonrisa torcida preguntó:

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-¿Y en qué estábamos?

- En que tengo una duda – me obligué a borrar las estúpidas ideas recientes y pregunté algo que me producía real curiosidad.

- Pregunta…

- ¿Por qué vas a Forks? Sinceramente no hayo el motivo de que vayas a un pueblo tan aburrido a vacacionar…o tienes algún familiar?

- Viví en Forks hasta los cuatro años, luego nos cambiamos a Chicago, pero mi madre nunca quiso deshacerse de la casa y por razones banales quieren volver a vivir ahí… en realidad da lo mismo, así ya no tendré que pagar un departamento para vivir cerca de la Universidad de Oregon, ahora me quedará relativamente cerca…- ¿Edward se va a vivir a Fork? Oh my fucking God...- Decidí venir antes que ellos para ver en qué condiciones se encuentra la estancia, llamar al personal de aseo y adaptarme al lugar por unas semanas antes que lleguen mis padres…- Espera…. ¿Y estará solo por algunas semanas? Eso si sería el paraíso…- Y creo que con eso ya he resumido parte de mi pasado, presente y un pequeño fragmento de mi futuro

- Te iras a vivir a Forks…- dije sumida en mis pensamientos.

- Es lo que acabo de explicarte- sí, claro, pero todavía no conseguía salir del shock.

- Eso es genial- logré decir.

- ¿Y por qué es genial? – preguntó de forma coqueta

- Porque así no seré la única persona que odie vivir allá…- sonreí, no podía exponerme tanto a sus filtreos, así que decidí bajar un poco los humos con mi comentario.

- Mmm… Seguro, aunque debo decir que no comparto tu hipótesis… Estoy convencido de que no me faltaran las distracciones- me guiño un ojo… ME GUIÑÓ UN OJOOOO… esto se estaba pasando, definitivamente esto iba más allá de mis delirios y debía comprobarlo… miré mi reloj y tenía aproximadamente 5 horas y media para cerciorarme de que no era sólo mi imaginación la que estaba cayendo en este pequeño jueguito…

Capítulo 5

- Mmm… Seguro, aunque debo decir que no comparto tu hipótesis… Estoy convencido de que no me faltaran las distracciones…- me guiño un ojo… ME GUIÑÓ UN OJOOOO… esto se estaba pasando, definitivamente esto iba más allá de mis delirios y debía comprobarlo… miré mi reloj y tenía aproximadamente 5 horas y media para cerciorarme de que no era sólo mi imaginación la que estaba cayendo en este pequeño jueguito…

- Mmm… - Pronuncié mordiendo mi labio inferior- Distracciones…- fue lo único que pude decir tratando de parecer lo más indiferente posible.

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Ahora debía trazar un plan… esto ya no era producto de mis fantasías, había algo más… increíblemente el tiempo con Edward se pasaba volando y tenía que aprovechar.

Una genial, pero arriesgada idea pasó por mi cabeza…

Por dios, a los extremos que estas llegando, ¿eh?. Pero sólo será este viaje y nada más… Una cosa es que él se vaya vivir a cerca de Forks, pero yo debo ir a la Universidad el otro año y Alaska no quedaba muy próximo que digamos, aparte las visitas a Charlie no creo sean tan frecuentes…

Entonces manos a la obra…

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Articulé un fingido bostezo y dije con falso desinterés:

- ¿No tienes sueño? Con lo que pasó no hemos dormido nada…- miré hacia abajo, ya que era pésima mintiendo y no quería que se diera cuenta.

- No trates de mantener la conversación si no lo deseas, duerme tranquila…

- No, no es eso – me apresuré a decir a la defensiva- No te quiero aburrir yo – me cargué la culpa… tenía que llegar de alguna forma al plan- Pero un viaje como éste fatiga… Y podemos seguir conversando un rato más… -lo miré y traté de sonreír de forma provocativa, rogando que diera resultado.

- Bueno… la verdad es que sigo un poco cansado… ya podremos conversar después… - por su mirada atisbé un doble sentido en sus palabras, pero no quise darle importancia, ya tenía otro asunto que tratar.

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Cerré mis ojos y recosté mi cuerpo ladeándolo para quedar casi frente al cuerpo de Edward… él se inclinó un poco hacia mi, pero no lo suficiente.

Traté de fingir una respiración acompasada lo mejor posible y comencé a contar ovejas…

Claramente mi intención no era dormir, cuando cuentas ovejas lo único que consigues es mantenerte desvelada… eso de que da sueño es una completa mentira.

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Habré estado ya en la número 600… calculando deberían haber pasado casi 10 minutos y no habían sido fáciles… no no no… podía sentir el olor de Edward desde mi ubicación, lo que dificultaba más mi tarea… la tentación es poderosa, pero con determinación la puedes controlar… con muuucha determinación.

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…Éste era el momento…

Abrí levemente mis párpados y comprobé que Adonis estaba dormido… se veía tan lindo con su semblante sereno, despreocupado…

Su pecho moviéndose al compás de su cadenciosa respiración.

Sus labios entreabiertos incitándome otra vez a caer, pero no, tenía que aguantar si quería seguir con el plan…

Volví a cerrar mis ojos y comencé a acercarme lentamente, poco a poco moví mi mano y comencé a tantear las proximidades de mi cuerpo…

Me encontré con su brazo, específicamente la parte inferior de su codo. Despacio avancé, apenas tocando muy lento hacia el centro y acerté con la superficie de su trabajado abdomen… un escalofrío recorrió mi columna, pero debía concentrarme en lo que estaba haciendo.

Bajé despacio apenas tanteando con leves toques hasta el borde de su pantalón y cuidadosamente remangué su camiseta con mis dedos separando la molestosa tela de su tibia piel… Mientras, al igual que él hace un rato, cargué suavemente mi cabeza contra su hombro…

Mi principal intención era incomodarlo… qué sintiera lo que yo sentí cuando él lo hizo, no obstante, la diferencia estaba en que mi actuar era a conciencia y un poco mas, mejor dicho, bastante deshonesto e impúdico que el suyo.

Introduje deliberadamente mi mano bajo su camiseta tocando descaradamente su marcado vientre…

Sentí su cuerpo tensarse por la sorpresa…BINGO…dí en el blanco…

O eso era lo que creía, por que fue su respuesta la que me sorprendió de vuelta

..

Con cuidado su mano levanto dulcemente mi cabeza, pasó con suma delicadeza su brazo de bajo de ésta y volvió a apoyarla contra su hombro, posó su cabeza suave sobre la mía y con su otro brazo me rodeó con ternura por la cintura acercándome hacia él suspirando con el contacto…

REALMENTE NO PODÍA CREERLO… yo que quería que saliera huyendo igual yo, reaccionó de la manera que menos esperaba…

Estaba completamente desconcertada, pasmada… esta cercanía era … sentir su pecho subir y bajar tan cerca del mío era una sensación exquisita, indescriptible, sentir la suave piel de su abdomen, el contacto en sí era electrizante, su impregnado aroma te cegaba los sentidos y finalmente sus brazos rodeando delicada y protectoramente mi cuerpo era como estar en el cielo…

Si había respondido de ese modo debía ser por algo… sino sencillamente me hubiese despertado, rechazado, llamado la atención y alejarse di mi como si fuese una acosadora, y en realidad lo era, pero no… me abrazaba… resguardaba mi sueño y en sus brazos yo encajaba perfecto…

Con su gesto había opacado a tal punto mis perversas ideas que sólo pude estrechar su torso un poco más y unirme a su descanso. Cayendo en los brazos de Morfeo…digo, Edward.


O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O-O


Ya había perdido la noción del tiempo. Pero tenía la impresión de que ya había avanzado bastante… Me sentía tan bien… nunca creí que dormir en un bus podía resultar tan ameno, atractivo, plácido, pero eso no era todo.

Fundida en un delicioso sueño sentí unos dedos trazar suaves círculos sobre mi hombro libre… no quería abrir mis ojos, quería saber que tan lejos esas leves caricias podían llegar…

Gracias a mi polera de tirantes podía sentir su contacto piel a piel, y la suya, su temperatura corporal estaba extrañamente bajo la mía, o será que MI temperatura era la afiebrada…

Cinco dedos bajaron suavemente por mi brazo, pasando por la parte inferior de mi codo y siguiendo su recorrido por mi antebrazo… su simple caricia formaba una punzada en mi estómago, enviando pequeñas corrientes que inundaban mi cuerpo en leves sensaciones.

Su mano se detuvo casi al llegar a mi muñeca y decidieron volver a rozar toda la extensión de mi extremidad de vuelta… el efecto de su leve contacto era tan absorbente y satisfactorio, pero deseaba un poco más…

De mi hombro descendió paulatinamente por mi costado haciéndome suspirar… cada poro de mi piel respondía ante su tacto.

Siguió por mi cintura y rodeó mi cuerpo un poco más hasta llegar a mi baja espalda abriendo lentamente su mano y apoyando la palma contra ésta.

Mi respiración estaba aumentando con cada provocativa caricia…

En ese instante en el que no esperaba más, su mano ejerció presión sobre la base de mi espalda atrayéndome y aplastando uno contra otro nuestros cuerpos… no pude evitar un pequeño jadeo que salió de mis labios…

Olas de electricidad invadían hasta el último rincón de mi piel. Mi respiración se volvía de a poco irregular, pesada, pero no podía abrir los ojos, sabía que había algo más…lo presentía…

En eso sentí unos húmedos labios repartiendo suaves besos en mi frente con la intención de descender…

Manteniendo la faceta de dormida fingí una respuesta automática a sus caricias deslicé suavemente mi mano y eleve el rostro esperando ansiosa el siguiente paso…

Mientras su pausada respiración tentaba mi piel, el roce de sus labios iba dejando ardientes huellas en su camino, bajando lento, pasando por mi entrecejo, bajando sin apuros por el puente de mi nariz, disfrutando de mi deliciosa tortura… Llegando a la punta de mi nariz…

Ya no aguantaba más, no podía seguir conteniendo mis reacciones, si me iba a dejar llevar lo iba a hacer por completo…


Capítulo 6


Mientras su pausada respiración tentaba mi piel, el roce de sus labios iba dejando ardientes huellas en su camino, bajando lento, pasando por mi entrecejo, bajando sin apuros por el puente de mi nariz, disfrutando de mi deliciosa tortura… Llegando a la punta de mi nariz…

Ya no aguantaba más, no podía seguir conteniendo mis reacciones, si me iba a dejar llevar lo iba a hacer por completo…

Pero su asustada voz me llamó la atención… era extraño por que la oía muy despacio y sentía un leve sacudón en mi cuerpo.

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-Bella… - me llamó su voz.

-¿sí?- contesté, quizás sólo me llamaba esperando la respuesta a sus besos.

-Bella…- me llamó otra vez.

-Si… - ahora iba a responder como quería…

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Abrí los ojos y vi que Edward no estaba tan cerca como yo creía, es más, se encontraba un tanto lejos de mí y suavemente sacudía mi cuerpo con sus manos en mis hombros…

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- ¿Bella?.. Al fin despertaste… - ¿Quéeeee?? Oh dios o sea que ¿Todo era un sueño? – Bella… ¿Tuviste una pesadilla? ¿Estas bien?- me miraba nervioso. Yo sólo lo miraba fijamente volviendo a la realidad de a poco…

¡¿Qué si estaba teniendo una pesadilla?¡ Estaba teniendo mi mejor sueño contigo imbécil ¡¡¡… no no no, él no tiene la culpa de que yo sea una estúpida fantasiosa…

Instintivamente mis ojos se llenaron de lágrimas de vergüenza y de pena…

Una parte de mi quería que esto fuese real… pero ya estaba llegando muy lejos… tenía que esconder la humillación y componer la mejor careta de dignidad e indiferencia que podía.

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-S-sí… estoy bien… - contesté como pude tratando de guardar las ansias de llorar.

-Pero mira como estas… ¿En serio estas bien? Dime si puedo hacer algo por ti… - seguía preocupado y seguía haciéndome sentir peor con su hospitalidad. Si supiera que clase de cosas mi subconsciente en sueños era capaz de desarrollar… me creería una completa acosadora mental.

-Edward… - pronuncié su nombre arrastrando cada letra- estoy bien… en serio, tuve… un sueño un tanto incómodo…- mis mejillas se tornaron rosas, podía sentirlo.

-Sí, eso pude apreciar… respirabas pesado y no despertabas cuando te llamaba… creí que tendría que golpearte – rió bromeando…

-Debiste… - por estúpida, seguro.

-Era sólo una broma cómo crees que haría algo así… - ya se había acabado lo divertido de sus ojos.

- … - chasqueé la lengua – no me hagas caso… recién estoy despertando. – miré mis manos como siempre hacía cuando me avergonzaba y no se cómo, pero traía una manta encima… Al parecer Edward se dio cuenta de mi descubrimiento…

-Pedí una manta… - levanté la vista y lo miré sorprendida – ya esta oscureciendo… la temperatura ha bajado y no quiero que te enfermes o algo así… - esbozó una pequeña y tierna sonrisa que mezclada con su reciente gesto de cobijo me hizo suspirar…

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Si los suspiros matasen Edward ya me hubiese asesinado.

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-Eh, gracias… - Con o sin manta en sus brazos no hubiese sentido frío alguno.

-Entonces… supongo que estamos a mano… - entrecerró los ojos, pero podía ver una pizca de picardía en su mirada… Se refería a lo que sucedió antes de dormirme junto a él.

-¿A mano? – pregunté haciéndome la tonta y claro, no me salía bien.

-Al parecer no soy el único inquieto al dormir… la diferencia esta en que tú eres realmente peligrosa - rió entre dientes.

-Lo siento… - dije sonrojándome más apartando la mirada… no podía enterarse de que era un plan.

-Pero yo no… así que – levantó mi barbilla con sus dedo índice y pulgar obligándome a mirarle – Estamos a mano. – concluyó guiñándome un ojo. Por Dios cuando dejaría de deslumbrarme¡. Sólo pude asentir apretando los dientes para no decir ni una imprudencia…

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Edward apartó su mano y miró hacia la ventana… seguí su mirada y vi el cielo un tanto oscuro… Miré mi reloj y ya eran las 7 de la tarde… En tan sólo dos horas terminaría este viaje.

No podía creer como el tiempo se me había resbalado de las manos cuando dormí en los brazos de Edward, había pasado durmiendo casi tres horas fundida en su abrazo, el mejor sueño que había dormido y tenido en toda mi vida he de decir y aunque una manta me abrigaba, lejos de mi modelito inglés sentía frío ¿De cuando lo llamaba MI modelito inglés? Por dios…

Y el modelito miraba silencioso por la ventana… pensando, o quizás planeando algo… no lo sé y me encantaría saberlo, en realidad me encantaría saber todo de él, pero no podía… O tal vez, quién sabe si podemos ser amigos… al menos por estos días… amistad a corto plazo…

Pero, querida Bella… necesitas saber si él quiere tu amistad de vuelta.

Hasta la hora había dado señales de simpatía y amabilidad… pero eso no significaba nada y en verdad era extraño… jamás le había mendigado amistad a nadie, pero de rogarle a Edward… sería capaz de hacerlo… lo sé, suena patético, pero definitivamente el resultado valía la pena.

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-Edward… - se giró lentamente hasta que sus verdes ojos atravesaron los míos. – Tenemos una conversación pendiente… - levanté una ceja sonriendo levemente esperando refrescar su memoria de lo que habíamos acordado antes de dormirnos.

-Ni pienses que lo he olvidado… - levantó sus cejas dos veces y me hizo reír. – Pero no recuerdo en qué habíamos quedado…

-Yo tampoco así que… Tema nuevo – No quería que dejara de hablar… quedaban dos horas de su compañía y él bajaba antes que yo.

-Mmmm… - arrugó su frente - no se me ocurre nada… - no sé por qué pero no le creí… Aún así decidí tomar partido de su falta de ocurrencia y quise entrar en plano emocional.

-¿Qué pensabas recién… cuando mirabas hacia la ventana? Te veías concentrado… no sé… si es algo privado no me cuentes… - procuré decir.

-Pensaba en los cambios… las decisiones…- expresó serio. - La vida te ofrece cambios… que tan sólo depende de uno aceptarlos,resignarse o recibirlos con una sonrisa en la cara…En tus palabras he logrado percibir tu no falta de adaptación si no resignación por vivir en tu actual hogar…Los cambios… generalmente afectan por completo, tu forma de ser, la manera de interactuar con otra persona, hasta tu forma de vestir quizás… tu ser en sí cambia aunque sea en lo mas mínimo…¿Has logrado percibir algún cambio positivo en ti desde tu cambio a Forks?- preguntó estilo psicólogo.

-¿Qué ahora cocino mejor? La práctica ha ayudado y ahora cocino bien, en serio.- dije medio en broma.

- … - sonrió- Quizás… eso debo comprobarlo primero…- levantó levemente sus cejas en un signo de provocación.

-Cuando gustes… - ofrecí ante su duda.

-Te tomaré la palabra lo juro- dijo sonriente, pero sus ojos eran serios.

-Y yo te juro que cuando digo algo lo cumplo… - sonreí engreída.

-Está bien… pero te juro que a mi no me gustan los arrepentimientos.

- …- rodé los ojos.

-Pero, no nos desviemos del tema- volvió a su antigua máscara de concentración y yo volví a escucharlo atentamente… no podía perder ni un segundo de su voz.- Aún me sorprende la… no se cuanto te habrá costado dejar tu antiguo hogar atrás para embarcarte, en sentido figurado, a un aburrido pueblo como tu lo llamarías… No sé qué te habrá llevado a tomar esa decisión y espero no te sientas incómoda con el tema que estoy tratando…- me miro con ojos de ¿te molesta? Y yo sonreí y negué con la cabeza… sólo quería que continuara… me encantaba la forma en que expresaba su parecer de las cosas… de la vida… me gustaba saber de él o tan sólo escucharlo hablar… - Las decisiones de la vida… el jugarte el todo con un tan sólo sí o no… las consecuencias y el efecto de dejamos a su paso, por una decisión el numero de personas beneficiadas y los afectados… el egoísmo de una decisión y lo empático de otra… El cómo puede cambiar mi vida o la del prójimo, el saber si estamos eligiendo bien, el temor a equivocarnos, el temor al daño, las inseguridades y las probabilidades frente a los posibles resultados… decisiones… pueden cambiar tu vida por completo… - casi hablaba para el mismo aun así yo estaba absorta en sus palabras…

-¿Como un simple viaje en bus…?- pregunté reflexiva

-Ajá… - vislumbré un pequeño brillo en sus ojos – Como un simple viaje en bus… - su boca dibujó una hermosa sonrisa…que no pude evitar devolver.

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Eso me dio mucho que pensar.

Nos sumimos en un silencio, no incómodo para nada… sino que reflexivo, sus palabras me habían llegado mucho…

A esta edad, tu vida gira en torno a elecciones varias, como la simple decisión de qué bus tomaré…

Y de esta decisión no podía arrepentirme… haber conocido a Edward en este viaje era lo mejor que me había podido pasar en un simple trayecto a Forks…

Y no tan sólo por recrear mi vista… sino que haber conocido su yo interior, su manera de ver la vida en cierto punto, su forma de explayarse, de explicarme lo que no hace mucho sentí y detallarlo con tanta claridad…

No sé cómo podré sacármelo de la cabeza cuando este viaje termine…

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-No me arrepiento de las decisiones… -dije despacio y él me miró expectante- que me trajeron a esto… - sobre todo la de tomar este bus me hubiese gustado decir… - mi cambio a Forks o las decisiones que he tomado este último tiempo… simplemente arrepentirte porque las cosas no resultaron como tu querías… No puedo retractarme por algo que yo elegí, siempre y cuando no haya sido obligada por alguien, pero me refiero a las decisiones propias… y no puedes añorar el no haber realizado tal acción o decir tal cosa porque fue así como simplemente lo sentiste y ya está… como dicen : Nunca te arrepientas de lo que has hecho

-Si no de lo que has dejado de hacer… - concluyó el refrán mirándome con sus hermosos ojos de esmeralda…

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Nunca pensé que congeniaríamos de esta manera… nuestras formas de pensar se conectaban entre sí… un pensamiento tras otro tejido celosamente… fluidos, sin necesidad de forzar a una opinión coherente según la palabra del otro… era algo natural… simple…

No quería resolver nada… una extraña sensación había nacido en mi interior que se expandía cada vez que Edward me miraba a los ojos…

No, no me permitiría sentir nada, pero era difícil… cómo no, él tenía un encanto natural, no sólo físico, ya que, de primera eso era el primer flechazo, pero luego, cuando llegas a conocerlo aunque sea un poquito, la fascinación por Edward era inevitable…

Ay Dios, de nuevo en qué piensas Isabella…

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Edward suspiró, pasó sus dedos por su broncíneo cabello desordenándolo un poco junto con mis pensamientos… ése gesto se veía tan sensual en él…

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-¿Tienes frío?- preguntó derepente.

-…Un poco, pero tengo un sweater en mi bolsa…- me incliné para tomarla. Saqué mi sweater azul y me enfundé en la delgada lana, pero engañosa, ya que, era muy calentita. Cuando volví la vista hacía Adonis él ya traía puesto un sweater gris.

-Te gané – dijo con una sonrisa infantil.

- …- sonreí moviendo mi cabeza hacia los lados… y es que en verdad nunca aprecié que se pusiera un sweater, ni sabía que traía uno junto a él… pero si todo el tiempo me deslumbraba admirándolo, cómo me iba a fijar en que si traía algún tipo de abrigo o no…

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-Bella… - de un momento a otro cambió su mirada de niño a una de suma seriedad, respondí con la mía atenta… primera vez que veía tanta rectitud en su rostro de ángel.

-¿Qué?- pregunté en un susurro.

-Ya te he dicho que soy relativamente nuevo en Forks y que voy a estar solo por un tiempo… - suspiró – No me gustaría que lo tomes a mal, pero… me gustaría tener la compañía de alguien mientras me… adapto en las cercanías del pueblo y… me gustaría saber si estarías dispuesta a darme tu compañía al menos por lo que queda del día…

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… Silencio….

Se me abrió levemente la boca por el impacto de su proposición…

¿Edward me pedía compañía por el resto del día? ¿En verdad era cierto? ¿No seguía soñando? Por favor, ¿En serio esto estaba ocurriendo?

Pero en sus ojos veía una formalidad de no dejaba albergar dudas a sus palabras…

Y yo no podía articular vocal alguna…

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-No quiero que te sientas ofendida… sé que eres una señorita, por algo quiero que sepas que mis intenciones son nobles… - dijo cauteloso para que no sacara conclusiones erróneas. Edward era un caballero…

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Y he me aquí… de nuevo con las benditas decisiones.

Edward me pedía compañía y yo hace poco pensaba en pedirle amistad…

Bien Bella… por algo se debe empezar ¿no?

Habría que ser una completa estúpida para rechazar algo así…

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-Entre pasar lo que queda del día viendo baseball con mi padre… definitivamente acepto ir contigo… - sonrió de manera ladina, que hacía acelerar mi corazón…

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No quise ponerme en evidencia aceptando de forma desesperada como podría haberlo hecho, pero en mi interior, mi corazón saltaba de alegría y aún más cuando elevó su mano en mi dirección y acunó cariñosamente mi mejilla…

Se acercó hasta quedar a centímetros de mi mejilla contraria… la besó suavemente y susurró un "gracias" en mi oído…

Un escalofrío me dejó paralizada al sentirlo tan próximo… solo pude contestar un silencioso "de nada" de vuelta.

Pero Edward no se retiraba, seguía con sus labios cerca de mi oído y yo no podía apartarme tampoco…

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-En azul te ves… realmente bien… - susurró de nuevo.

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Volvió a besar mi mejilla una vez más, dulce, despacio… y otra vez retrocediendo lento desplazándose camino a mis labios…

Su boca seguía deslizándose entregando suaves roces en mi rostro… acercándose lento y suave, un beso tras otro…y cada vez mas cerca hasta llegar a la comisura de mis labios…

Mi respiración era lenta y profunda y su tibio hálito rozaba mi piel…

La mano que descansaba en mi mejilla avanzó despacio hasta posicionarse en mi nuca… Por impulso llevé mis manos hasta su pecho el cual se movía al unísono con su ligero respirar…

Sus labios avanzaron un poco mas abarcando la casi la mitad de los míos presionándolos un poco… los entreabrí invitándolo a probar si así lo deseaba… y efectivamente así era… terminó su recorrido uniéndolos completamente en un cálido beso...